Cultivo de lesión

El estudio del cultivo de lesión implica tomar una muestra de tejido de una lesión en la piel u otra área del cuerpo y cultivarla en un medio de cultivo en el laboratorio. Este procedimiento se realiza para identificar la presencia de microorganismos, como bacterias, hongos u otros patógenos, que pueden estar causando la lesión o contribuyendo a su infección. El cultivo de lesiones es útil para diagnosticar infecciones cutáneas, como celulitis, abscesos, úlceras o heridas infectadas. Una vez que se identifican los microorganismos presentes en la muestra y se determina su sensibilidad a los antibióticos, se puede prescribir un tratamiento específico para controlar la infección y promover la curación de la lesión. Este estudio es especialmente importante en casos donde el tratamiento convencional no ha sido efectivo o cuando hay signos de infección grave.